Causas del autismo
El autismo es un trastorno del desarrollo neurológico que afecta a millones de personas en todo el mundo. Aunque todavía no se sabe exactamente qué lo causa, hay algunas cosas que los expertos creen que pueden estar relacionadas.
Factores genéticos
Una de las causas más comunes que se cree que contribuyen al autismo son los factores genéticos. Los estudios sugieren que los genes pueden desempeñar un papel en el autismo. Si alguien tiene un hermano con autismo, por ejemplo, es más probable que también lo tenga. Además, algunas mutaciones genéticas específicas se han relacionado con el autismo.
El estudio sobre autismo más grande de la historia
La gran variabilidad de trastornos apunta a que distintos genes y diferentes factores del ambiente de desarrollo tienen relevancia en una posible explicación del diagnóstico. De hecho un estudio reciente, el más grande de la historia, logró vincular más de 100 genes asociados al autismo [1].
Algo interesante de este estudio es que algunos de los genes indentificados tienen también relación a discapacidades intelectuales y en el desarrollo, mientras que otros son exclusivos de trastornos del espectro autista y parecen estar relacionados con las dificultades sociales que marcan el trastorno.
Otro punto importante es que un estudio reciente, de aproximadamente 2 millones de personas, estimó que los genes representan el 80% del riesgo de TEA.
Por último, el estudio indicó que la mayoría de los genes de riesgo están activos a una temprana edad en el desarrollo del cerebro y tienen roles fundamentales en la regulación de la actividad de otros genes o la comunicación de las células del cerebro.
Los genes de riesgo también participan en las neuronas excitadoras e inhibidoras lo que explica las muchas interrupciones en las funciones de las células del cerebro.
Los hallazgos fueron publicas en la revista Cell el 23 de enero de este año 2020.
Conclusiones actuales sobre las causas del autismo
Como ya te adelantábamos, la investigación indica que la genética está involucrada en la gran mayoría de los casos.
Los niños nacidos de padres mayores tienen mayores probabilidades de tener autismo.
Una pregunta típica de padres que tienen un(a) hijo(a) con TEA es ¿qué tan probable es que tengamos un segundo hijo con autismo? La respuesta es que existe una probabilidad de un 2 a un 18 % de que el segundo hijo tenga TEA.
¿Qué pasa con los gemelos idénticos? Los estudios indican que si uno de los niños tiene TEA, el otro se verá afectado entre el 36 y 95 %.
¿Qué pasa con los gemelos no idénticos? Si uno de ellos tiene autismo, el otro se verá afectado el 31 % de las veces.
Factores ambientales
Otra causa que se ha investigado es la exposición a ciertos factores ambientales. Algunos expertos creen que ciertos factores ambientales, como la exposición a productos químicos tóxicos, pueden aumentar el riesgo de autismo. Aunque se necesitan más estudios para comprender mejor la relación entre los factores ambientales y el autismo.
Factores de riesgo prenatal
Además, se cree que los problemas en el desarrollo cerebral son otra posible causa del autismo. Se piensa que el autismo es causado por problemas en el desarrollo del cerebro, que pueden ocurrir en cualquier momento durante el embarazo o en los primeros años de vida. Esto puede incluir problemas con la conectividad neuronal y la comunicación en el cerebro.
Aunque no se sabe exactamente qué causa el autismo, es probable que sea el resultado de una combinación compleja de factores genéticos, ambientales y del desarrollo cerebral. También es importante tener en cuenta que múltiples estudios han demostrado que no hay evidencia de que las vacunas causen autismo.
El mito de las vacunas
Por último, existen muchas personas que piensan y creen en que las vacunas infantiles pueden causar autismo y la respuesta a esto es que no existe ninguna investigación que determine que esto sea así. Así que en resumen, las vacunas no causan autismo.
Este último punto sobre las vacunas como la causa del autismo en niños nace por los estudios desarrollados por el Dr. Andrew Wakefield que establecían esa posible conexión, pero finalmente se determinó que carecían de rigor científico y estaban falseados.
Conclusión
Si bien aún no se conocen todas las causas del autismo, es importante seguir investigando para ayudar a comprender mejor este trastorno y desarrollar tratamientos más efectivos. Además, es esencial recordar que las personas con autismo merecen nuestro respeto y apoyo, y no deben ser estigmatizadas ni discriminadas debido a su condición.
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